AUSTRIA (julio 2011) ***AÑADIDO AL INDICE*** (sf)

[Ñakona]

Aquí va la crónica del viaje que hemos hecho estas vacaciones. Después de ir en Semana Santa a Bretaña (http://www.furgovw.org/index.php?topic=220027.0), se nos ha pasado muy rápido el tiempo hasta las vacaciones de verano, con lo cual hemos tenido poco tiempo para decidir el nuevo destino, y preparar el viaje con más detenimiento. Además hemos dudado entre varios destinos, hasta que un par de semanas antes de las vacaciones nos hemos decantado por Austria para, entre otras cosas, hacer una visita a un amigo que vive en Viena por trabajo desde hace 3 meses, hacerle un poco más llevadera su estancia allí y pasar unos días con él. Como digo, el viaje ha sido preparado muy por encima, únicamente llevando unos cuantos sitios que visitar, para luego ir improvisando sobre la marcha, sin pretensión de detenernos mucho en cada sitio. Además, este año queríamos ver una etapa del Tour, y nos coincidía la que pasa por el Tourmalet, así que la añadimos como primer destino de las vacaciones. Y esto es lo que dió de sí la cosa...

Datos:
Días: 17 (del 13 al 29 de julio 2011)
Vehículo: VW T5 California Confortline 140cv, versión 2011.
Kilómetros totales: 5889.6
Consumo medio ordenador de a bordo: 8.3 L/100.
Consumo medio real: 8.3015 L/100.
Consumo total gasoil en litros: 488.93 litros.
Gasto total en gasoil: 647.84 €.
Gasoil repostado más barato: 1.267 €/l en Valladolid.
Gasoil repostado más caro: 1.409 €/l en Friedrichshafen, Alemania.
Gasto en peajes: 120.1 € (incluyendo los 27 € de peaje en carretera Grossglockner)
Viñetas: 7.90 € ( viñeta 10 días Austria) y 7 € ( viñeta 7 días Slovakia).

Día 1, miércoles 13 de julio:



Pulverizando todos nuestros mejores registros, conseguimos salir a las 8:30 horas, después de preparar algunas cosas a última hora (conseguiremos alguna vez dejar todo preparado la noche anterior...?). El marcador de la furgo presentaba este aspecto:

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Después de comer en un área de descanso ya en Francia, conseguimos llegar a La Mongie a las 16.30 h, bajo una lluvia y una niebla bastante considerable. A través del hilo abierto en Kedadas y algún privado, nos habíamos enterado que Alcasa iba a estar allí desde el día anterior. Nos mandó las coordenadas exactas donde estaba él, y nos dijo que allí había sitio aún, así que fuimos directos para allá, y aparcamos a la primera. Quedamos con Alcasa y señora en un bar, y nos tomamos un café mientras caía una chupa de agua seria. El día no dió mucho más de sí: cena en la furgo, y café antes de dormir.

Día 2, jueves 14 de julio:



Después del desayuno, nos dimos un voltio por La Mongie para ver el ambiente, comprar el pan, y hacer tiempo hasta la hora de comer. El día se había levantado mejor, y por lo menos no llovía, lo cual nos permitió comer en la calle antes de la carrera, viendo el ambiente desde el sitio privilegiado que Alcasa se había agenciado. Esto, unido al menú que conseguimos juntar, nos hizo pasar un rato de lo más agradable, hasta que empezó todo el tinglado de la caravana publicitaria.

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La T3 de Alcasa en posición:
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Lula observando el trajín que se traían los abuelos de Geraint Thomas:
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La caravana publicitaria:
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Y luego ya la carrera:

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Alcasa posando para su señora frente al pelotón:
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Mítico personaje, con mítica furgo:
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Después del paso de los ciclistas, vimos el final de la etapa en la tele de la AC de una familia gallega que estaban al lado de la furgo de Alcasa, disfrutando de Samu Sánchez ganando el etapón. Una vez terminada la etapa, empezó el mega atasco para bajar el puerto. Increíble la cantidad de gente que hay metida en el puerto. Viendo la que había montada, decidimos hacer caso de la recomendación de Alcasa de esperar para bajar, así que nos fuimos otra vez para abajo a tomar algo hasta la hora de cenar. A las 22.30 h aprox., y ya cenados, nos dispusimos a bajar el puerto, que ya estaba despejado, nosotros para seguir camino hacia el norte de Francia, y Alcasa y señora hacia su casa (desde aquí un saludete para ellos  , que hemos pasado un par de días en muy buena compañía con vosotros). Así que nos despedimos, y decidimos hacer algo de camino, hasta llegar al área de Ac de Lisle sur Tarn (http://www.furgovw.org/index.php?topic=205297.0), a donde llegamos a la 1.30 h, y que encontramos llena, por lo que dormimos en la  entrada, donde ya había alguna AC más.


Día 3, viernes 15 de julio:



Sobre las 11 de la mañana, después de desayunar tranquilamente al sol, nos pusimos a hacer kilómetros hasta que nos pareció, y buscamos un camping en el GPS (donde, a parte de los furgoperfectos del foro, llevamos varios archivos de páginas francesas). Fuimos a dar al camping Le Lac, en Palinges (http://www.furgovw.org/index.php?topic=226250.0), a donde llegamos a las 18.30 h, con tiempo de darnos una ducha, conectarnos un rato vía WiFi y descansar un rato al aire libre, antes de cenar y dormir.


Día 4, sábado 16 de julio:



Después de las tareas propias de una mañana en camping (desayuno kilométrico, recogida de trastos, pequeño reordenamiento de la furgo, 2ª ducha...), salimos hacia las 11 de la mañana. Habíamos decidido acercarnos hasta el fr-Ikea de Dijon a comprar una almohada y un colchoncillo para la cama de abajo (para los días que no pudiésemos abrir el techo), porque para mí es demasiado dura la cama de abajo (supongo que será por el peso, aunque en la Beach no me pasaba, y la cama es igualita). Habíamos preguntado a la recepcionista del camping cual era la mejor ruta para ir hasta Dijon, y nos mandó por carreteras secundarias, lo cual nos permitió recorrer un montón de pueblos de la Borgoña, plagados de viñedos hasta donde alcanzaba la vista, conformando un paisaje precioso (del cual lamentablemente no tengo fotos).
Llegamos al fr-Ikea de Dijon sobre las 13.15 h. Mientras una entra a hacer las compras, el otro se queda con la compi peluda dando un voltio por el parking, y aburriéndonos luego un rato con la espera. Después de aprovechar para comprar en el E.Leclerc y repostar gasoil, nos vamos a comer a un área pequeñita en la carretera que hemos cogido para continuar el viaje para coger la autovía ya cerca de Besançon, en una zona de bosque. Un poco más adelante, y para no perder tiempo, paramos a tomar el café más atroz de la historia, en una especie de Restaurante-Grill de carretera, que tampoco tenía tan mala pinta desde lejos..
Sobre las 18.30 aprox, estábamos en Freiburg-im-Bresgau, ya en Alemania. Aparcamos la furgo en una calle bastante céntrica, y nos fuimos a dar una vuelta por el centro, y a tomarnos la primera cerveza alemana en una terraza. Después estuvimos recorriendo diferentes calles donde había una especie de fiesta, que no supimos muy bien lo que era. Había puestos de diferentes asociaciones, y luego en algunas calles, había cuadrillas de gente cenando, como si fueran peñas en las fiestas de por aquí. Pero bueno, el ambiente muy bueno, la verdad. Es una ciudad que a los dos nos ha gustado mucho, y a la que esperamos volver con más tiempo.

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Ya cuando anochecía, y con idea de pasar el día siguiente en la Selva Negra, cogimos la carretera dirección Neustadt-Titisee, para buscar algún sitio para dormir en algún pueblo cercano. El pueblo elegido fue Buchenbach, un pequeño y tranquilo pueblo, donde encontramos un parking al lado de la iglesia y el cementerio muy tranquilo, donde dormimos sin ruidos ni molestias a excepción del calor que hacía, después de cenar y dar un paseo por la orilla del río.


Día 5, domingo 17 de julio:



Nos despertamos temprano oyendo llover, y cuando digo llover no digo cuatro gotas, sino LLOVER. Tras desayunar rápidamente en la furgo, nos ponemos en carretera dirección al corazón de la Selva Negra. La cantidad de agua que caía y que se acumulaba hasta en la carretera, nos hizo replantearnos el día ya en Neustadt, donde después de entrar con la furgo, y no bajarnos a causa de la que estaba cayendo, decidimos continuar hacia Konstanz para ver si nos librábamos de la chaparrada. Durante el camino no dejaba de llover, de tal manera que en el tramo de autopista que pillamos, donde hay tramos sin límite de velocidad, raro era el que pasaba de 90-100.

Así caía, aunque no sé si se aprecia bien en el video
[flash=425,349]https://www.youtube.com/v/6JeSyk7FXVA?version=3&hl=es_ES[/flash]

Así llegamos a Konstanz, aparcamos la furgo en un céntrico parking subterráneo, y nos pusimos a caminar bajo la lluvia hasta que encontramos una terraza a cubierto, en la zona del puerto, donde decidimos quedarnos a comer. Tras alargar la comida un rato, vimos que dejaba de llover un poco, y aprovechamos para darnos un paseo por el centro de la ciudad, hasta que de nuevo comenzó a caer la de dios, lo cual nos obligó a cobijarnos un rato en el portal de un bar cerrado, porque el paraguas de Furgovw (obsequio de la nacional de Aranda) no daba para más. Hablamos por teléfono con un amigo, nos miró la meteorología en la zona de Salzburgo y en la zona del Tirol, y nos aconsejó dejar el Tirol para más adelante porque daba muy malos días. Viendo como estaba el panorama, decidimos ir poniendo rumbo hacia Salzburgo, dejar la zona del Tirol para la vuelta, igual que habíamos hecho con la Selva Negra.
Como llevábamos una mojada bastante seria, decidimos parar en Prien am Chiemsee, y buscar un camping. Fuimos primero al Panorama Camping Harras, al lado del lago, pero nos querían cobrar 31 euros y algo por ponernos en una explanada a dormir. Así que nos fuimos a este otro (http://www.furgovw.org/index.php?topic=226265.0).


Día 6, lunes 18 de julio:



Salimos del camping, después de lo típico en una mañana de camping (como decía más arriba), además de vaciar y llenar depósitos, y de echar la parlada con un autocaravanista italiano muy majete sobre el viaje nuestro, sobre el suyo y la meteorología reinante en la zona, en comparación con la de Italia y la costa sur de la península ibérica. A la salida del camping, cuando íbamos en dirección hacia la autopista, me acordé que el testigo del depósito de aguas limpias de la centralita (http://www.furgovw.org/index.php?topic=226301.0)  llevaba días parpadeando justo al pasar por un concesionario y taller VW. Así que me dije: qué mejor sitio para que me lo miren que un concesionario en Alemania, así que parada al canto. Entro a la recepción, se lo comento a la recepcionista que allí estaba en mi macarrónico inglés, y se puso toda nerviosa porque decía que no hablaba muy bien el inglés, y más todavía cuando le dijo algo al jefe de taller que pasaba con una carpeta, y éste pasó de su culo (y del mío) maldiciendo mientras se dirigía a un vehículo que estaba en el exterior. Así que la señorita, toda nerviosa y sonrojada, me dijo que es que estaba cerrado ya, y que abrían a las 14 horas (en ese momento eran las 11 y pico de la mañana). Así que salí de allí, corroborando el horario en el letrero de la puerta, y nos fuímos en dirección a Salzburgo.
Tras parar en la frontera a comprar la viñeta, que nos vendió muy amablemente una chica colombiana en perfecto castellano de Colombia, continuamos camino hacia Salzburgo, a donde llegamos no mucho tiempo después. Al menos el tiempo parecía que respetaba: aunque no hacía calor, al menos no llovía.

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Llegamos a la ciudad, y fuimos en dirección centro hasta que encontramos un parking donde dejar la furgo (Parking Mirabell). Días después leí en la información que llevaba extraída de otros foros que era el menos recomendable, por ser de los más caros (unos 12 € nos costó la novatada). Nos fuimos dando una paseo por la zona centro, donde empezamos a ver turisteo total en los edificios más importantes, y en las calles más comerciales, que están llenas de lujosas tiendas de las marcas más exclusivas. Cuando nos pareció bien, buscamos un sitio para comer por la zona, y fuimos a dar a un restaurante muy céntrico, Saran (estilo hindú pero con comida variada)donde nos metimos unas salchichas y el primer Wiener schnitzel del viaje, con bebida por 26 €, precio que nos pareció asequible. Por cierto, no tuvieron problema en que entrásemos con la compi peluda (www.saranessbar.at).

Aquí está el restaurante... bueno, más bien metido en esa calle
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Nos dimos otro paseo por el centro, y de ahí a un café con terraza en Residenz Platz, donde disfrutamos de estas vistas, y nos relajamos un rato viendo a los turistas ir de un lado a otro a toda mecha:

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Cuando nos pareció bien, nos fuimos a dar otra vuelta. Estuvimos viendo un grupo de danzas en la Mozartplatz, que hacían coreografías con música clásica que nos entretuvo un rato. Nos fuimos luego hasta la zona del castillo (Fortaleza de Hohensalzburg), a la que no entramos porque no dejaban entrar a perros arriba. Así que nos fuimos dando otra vuelta por la ciudad, después de ver un cementerio muy curioso justo al lado, que tiene algunos mausoleos excavados en la roca.

Cementerio:
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Esa no es mi T5
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Tienda todo100 en Austria: 
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Después de este largo paseo, dimos por concluida la visita a Salzburgo, y nos fuimos a recoger la furgo. Cuando nos disponíamos a salir de la ciudad se puso a llover, aunque por lo menos nos había respetado durante todo el día. La ciudad nos gustó bastante, aunque los dos coincidimos en que la masificación turística de estas fechas le hace perder bastante encanto. Parece que en invierno, como nos comenta una amiga que ha vivido cerca, sí que mantiene ese encanto que se le presupone a la cuna de Mozart y Von Karajan. Habrá que volver en invierno a ver...
En un listado que llevaba de las áreas de AC de Austria, aparecía una que nos pillaba en la ruta hacia Hallstatt, nuestro siguiente improvisado destino, en un pueblo llamado Golling an der Salzach, así que nos pareció buena idea salir de la ciudad, y dormir tranquilamente en zona más rural. Cuando llegamos al pueblo, el paisaje nos pareció precioso, una zona de valle muy plano, todo rodeado de montañas y muy verde. El área estaba en el parking de un Spa, y cuando llegamos nos pareció que estaba muy bien cuidada y nueva, y con unas vistas alrededor espectaculares. Casi no había coches, ya era casi de noche, y no había ninguna autocaravana. Así que nos terminó de parecer el sitio idóneo para dormir tranquilamente. Después de un rato de paseo por los alrededores, nos decidimos a entrar a preguntar precios del spa para la mañana siguiente darnos un chapuzón antes de seguir camino. La información sólo la tenían en alemán, así que seguí con mi curso acelerado de inglés macarrónico. En un momento de la conversación me preguntó la amable recepcionista que si estábamos alojados en el pueblo, y le dije que no, que estábamos con la furgo en al área AC. Me preguntó que si sabía que había que pagar por pernoctar, a lo cual respondí que no (no lo ponía por ningún lado, o yo no lo ví). Cuando me dijo el precio, le dije que si no le importaba anulara la ficha que me estaba haciendo, que nos íbamos. Nos quería cobrar 18 € sólo por dormir, sin electricidad ni nada. Así que carretera. Cenamos en el parking de un Spar, y tras lo cual cogimos la carretera que lleva hasta la zona de Hallstatt, parando finalmente a dormir en Abtenau, en un parking en el interior del pueblo, dónde nos pusimos en una esquina sin levantar techo ni cerrar cortinas en la parte delantera.



Día 7, martes 19 de julio:



Nos levantamos temprano para no dar el cante en el parking con un día soleado y con cielo azul, que hacía contraste con el verde y marrón del paisaje. Decidimos salir a la carretera y buscar un sitio para parar a desayunar. Casi nada más salir del pueblo vimos una montaña rusa, y decidimos parar a ver como iba la cosa. Como era muy pronto estaba aún cerrada, así que decidimos dejar la experiencia para otro día que nos cuadrase mejor.

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Continuamos unos pocos kilómetros por una carretera preciosa, con unos paisajes realmente bonitos, y plagada de remontes de esquí por todos lados (tiene que ser una zona brutal para irse unos días a esquiar) hasta que encontramos un pequeño merendero, en un lateral, donde paramos a desayunar tranquilamente, en el pueblo de Russbach. Sólo tenía una mesa, rodeada de un jardín y bordeada por el otro lado por un río. Un sitio espectacular de verdad:

Esta va para el calendario del próximo año...
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Después de desayunar tranquilamente, recogimos y continuamos camino hacia Hallstat, donde llegamos bastante pronto. Aparcamos en el parking 3, que estaba aún prácticamente vacío, y nos fuimos a ver el pueblo tranquilamente. La verdad que impresiona desde el primer momento. Además a esa hora todavía no se veía mucho turisteo, de hecho no se hizo agobiante la cantidad de gente el resto del día. Después del empacho de fotos, nos dispusimos a coger un barco que hace un recorrido por todo el lago (19 € dos personas+perro). Mientras estábamos intentando descifrar la información en el muelle, conocimos a una pareja de autocaravanistas de Valencia, con los que estuvimos intercambiando información de rutas, sitios, etc. Hicimos el recorrido en el barco con ellos, y otra vueltecilla por el pueblo, para hacer alguna compra. Era la hora de comer (aquí, porque allí casi era la de cenar...), y les debió parecer bien nuestra compañía, pues se empeñaron en que comiéramos con ellos en el camping del pueblo donde habían pernoctado. Juntamos algo de comida, y allí tuvimos una agradable comida y posterior sobremesa con ellos, hasta que hubo que levantarse de la mesa y ponerse en camino para seguir la ruta.


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La casa que he dejao apalabrada para cuando me toque el euromillón (lo que no se es como voy a meter la T5 en ese garaje...)
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Después de coger la furgo del parking (7 €), nos vamos dirección Mauthausen, que será el destino del día siguiente. Decidimos para en las afueras de Linz, en el Camping Linz (http://www.camping-linz.at/index_start.php), que no he puesto en furgoperfectos porque me pareció un poco ruidoso, ya que está justo al lado de una carretera que va paralela a la autopista y a unos 150 m del camping, pasa cerca también la vía del tren, y además debe estar cerca el aeropuerto porque pasaban aviones bastante bajo. En cuanto a instalaciones, todo más o menos correcto, con unas parcelas gigantes y mucho césped, y por 22.50€ la noche (furgo, dos adultos y perro).




Día 8, miércoles 20 de julio:



Nos despertamos ya lloviendo y con un día supergris. Despúes de recoger más rápido de lo normal, pues no se podía alargar la hora del desayuno y además de que queríamos llegar pronto a Mauthausen, nos pusimos en camino. Tras cruzar el Danubio en el pueblo, fuimos siguiendo las indicaciones hacia el campo de concentración (ahora memorial), avanzando por una estrecha carretera en subida y con curvas, hasta que se llega a la planicie elevada en la que está, rodeados de una lluvia fina y nubarrones grises que te iban metiendo ya en ambiente. Dejamos a la compi peluda en la furgo, aparcada en el parking, que normalmente es de pago, pero que ese día tenía las barreras de entrada y salida levantadas, y nos dirigimos hacía el edificio del memorial, donde está la recepción, información, etc. Tras sacar los tickets de entrada (2€ por persona), nos dirigimos a la zona del campo propiamente dicha, donde pasamos toda la mañana. No voy a entrar en muchos detalles de la visita, pero decir que de las cosas que más nos impresionaron fue la entrada en uno de los barracones donde hay una exposición de carteles explicativos del funcionamiento y las circunstancias que rodearon el campo, donde al poco de entrar escuchas sonidos que reproducen los sonidos originales del campo: un soldado nazi voceando a un prisionero en alemán, un pastor alemán ladrando como un loco, lloros, alaridos, y finalmente unos disparos que preceden al silencio posterior. Te quedas sin gota de sangre, la verdad. Luego vimos que es una retroproyección que había más adelante, donde salen recreaciones dibujadas del salvajismo del campo, ambientadas con esos sonidos que te dejan acojonao. La otra cosa que me gustaría descatacar, es que en la exposición todo está en alemán y algunas cosas en inglés, pero ni rastro de otros idiomas. Las audioguías que te alquilan, igualmente sólo en alemán e inglés, cosa que no me pareció muy justo si lo que realmente se quiere es que esto sirva como recordatorio y memorial para que no vuelva a suceder, y que gente de todas las nacionalidades puedan entender lo que allí pasó. Que no haya información en castellano, siendo conocido este campo como el Campo de los Españoles, por la importancia que éstos tuvieron desde el principio hasta el final de la vida del campo, tampoco me parece muy coherente. Sin olvidar que murieron en él más de 30 mil soviéticos y otros tantos polacos. Si alguien tiene interés, puede ver el documental Mauthausen, una mirada española, impresionante testimonio de lo que allí pasó. El caso es que sales un poco tocado de allí.

Memorial Republicanos españoles y placa informativa:
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Famosa foto de la liberación del campo, cuya entrada estaba presidida por una pancarta de los republicanos españoles:
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Según cuenta Mariano Constante, el narrador del documental mencionado más arriba, los que salen en esta foto también eran prisioneros republicanos:
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Cuando bajamos, todavía con los pelos de punta, vimos un cartel en el que ponía Soldatenfriedhof, y nos fuimos a buscarlo. Creo que los austríacos sienten un poco de vergüenza por todo lo que allí pasó, porque las indicaciones de este cementerio desaparecen, y cuesta encontrarlo, parece como que esté escondido. Después de dar unas vueltas, conseguimos encontrarlo en una calle, donde no había ninguna indicación. De hecho, allí no había nadie, y la gente que veíamos parecía pensar Dónde van éstos por aquí?. Aparcamos en la misma puerta, y allí estuvimos viéndolo en completa soledad.

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Después de esta visita, como se había hecho tarde ya, decidimos ir a celebrar la victoria aliada a uno de sus legados después de la gran contienda. Así que nos fuimos a quitar el hambre a un McDonald's que había en el mismo pueblo  , donde curiosamente no tenían ni sabían lo que era la mostaza.
Continuamos camino en dirección a Melk, por la autopista. Como no habíamos tomado café, decidimos para en algún pueblo a tomarlo. Cogimos una salida de la autopista, y nos plantamos en un pueblo sin ningún interés turístico especial, pero quizá más conocido que ningún otro destino de la zona por otras causas: Amstetten. Fuimos al centrico Café Udo, donde Udo nos atendió con exquisita atención, haciéndonos pasar dentro del bar con el perro, pues hacia bastante fresco en la terraza, y nos preparó un excelente café, aderezado con una excelente conexión WiFi.

Tras dar un breve paseo por el centro de la ciudad, continuamos camino, yendo directamente a estacionar al FP de Melk (http://www.furgovw.org/index.php?topic=197959.0). Desde allí nos dimos un paseo por los alrededores de la famosa abadía, que ya estaba cerrada, y luego por el pueblo, muy tranquilo y sin nada de turismo.

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Ya no saben que inventar para sacar el dinero al personal...
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Cuando nos pareció, nos fuimos hacía Sankt Pölten, donde dimos una vuelta por un desierto barrio céntrico. Lo siento pero no tengo fotos, después de ver cómo eran los niños en ese pueblo no hice ni una...

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Como ya iba siendo tarde, nos fuimos buscando un parque donde cenar, y ver si era posible dormir por allí. Encontramos un parque muy grande a las afueras, cerca de donde está el camping de la ciudad, plagado de señales de prohibido pernoctar. Así que cenamos, y nos fuimos a buscar algún pueblo cercano donde pernoctar, sin mucho éxito, por lo que decidimos volver al FP de Melk. Lo importante es que ya estábamos cerca de Viena, donde nos esperaba nuestro amigo, ya libre de obligaciones laborales por unos días.

[Ñakona]

Día 9, jueves 21 de julio:




Nada más levantarnos, nos ponemos en camino hacia Viena, con lluvia a ratos. Paramos en el primer área de descanso de la autopista a desayunar, y proseguimos hacia Viena. Por el camino, mientras uno conduce, la otra va mirando los campings que hay allí, para ver cual nos puede interesar más. Nos decidimos por el Camping Wien Neue Donau (http://www.wiencamping.at/nd/en/index.asp), que parece que es el más cercano al centro. Nos vamos directos al camping atravesando Viena por calles más o menos céntricas, hasta que cogemos una de las rondas exteriores, y llegamos al camping. Queremos dejar allí la furgo, y antes de irnos al centro poner una lavadora, darnos ducha, etc. No he puesto este camping en el listado de FP, porque con el trajín de esos días y las cervezas de medio litro se me olvidó hacer fotos. Aunque es un típico camping de ciudad, muy transitado, y muy ajetreado durante el día, sí que me parece que puede ser una buena opción para visitar Viena (24.50 € furgo, dos adultos y perro, con WiFi incluído), ya que además de tener parada de bus en la puerta, tiene parada de metro a unos 5-10 minutos andando, que es la mejor opción para ir al centro. La estación es Donaustadtbrücke (Línea U2), que te deja en Kalrsplatz en unos 10 minutos. Además el metro no cierra por la noche, así que no hay que andar pendiente de horarios. Se puede ir con el perro en metro, aunque en los carteles pone que hay que llevarlos con bozal.
Así que después de instalarnos, lavar ropa, ducha, etc, nos fuimos hacia el centro, donde nos esperaba ya nuestro amigo, para enseñarnos la ciudad un poco. Después de un primer paseo por el centro, nos vamos a comer a un restaurante muy nuevo en la calle Opernring, muy cerca del edificio de la ópera, que está prácticamente vacío, pues ya son las 3 y pico. Después de dar buena cuenta del segundo Wiener schnitzel del viaje, seguimos nuestro paseo por el centro, parando al cabo de un rato a tomarnos un café y unas tartas en la terraza que da a la calle Kärnterstrasse del famoso Hotel Sacher, famoso por la tarta de chocolate que lleva su nombre:

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Después continuamos nuestra visita a la ciudad de paseo hasta que paramos a repostar en una terraza en la calle Mariahilfer, donde ya nos quedamos a cenar y a seguir con las cervezas poniéndonos al día de las novedades. Cuando dimos por concluída la velada, nos fuimos hacia el camping en el metro, a donde llegamos algo tarde.

El Hofburgtheater, donde se hace el concierto este que ponen en Año Nuevo cuando te levantas con la resaca padre, o acabas de llegar con ella:
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Bolsa de Wien, con gasolinera adosada. Claro, el precio para los de la bolsa...
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Caja de semáforo:
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Día 10, viernes 22 de julio:

Después de aligerar un poco en el camping, dejamos pagada otra noche, y nos vamos hacia el centro en el metro. Tras dar un voltio, nos fuimos a echar un ojo al Schönbrunn, donde tuvimos que dejar a la compi peluda en la puerta con nuestro amigo para poder entrar (ni siquiera dejan entrar a perros en la primera zona).

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Después de ver los jardines y las vistas, nos fuimos a la zona de Stadtpark, que es por donde trabaja nuestro amigo. Tras dar un largo paseo por la zona, decidimos entrar a tomar una jarra a una taberna de la zona, de las de gente de allí y sin turistas. Nada más pedir las cervezas, empezó a jarrear en la calle como si lo fueran a prohibir. Cayó una chupa de agua muy seria, así que hasta que no aflojó, allí estuvimos bebiendo cerveza. Además, en los bares de allí, cuando ven que te acabas la cerveza, vienen y te preguntan que si te la llenan, así que nunca te falta alpiste. Con la alegría de varias jarras ya, nos dispusimos a ir a comer a un Running Sushi  en un centro comercial cercano, en el que por 40 € incluyendo las cervezas que nos seguimos tomando, comimos los 3 todo lo que quisimos sin levantarnos de la silla.

Curioso este sistema, que los de pueblo no conocíamos por estos lares:
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En el centro comercial, daban estos periódicos:
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En una tienda a la salida, vendían estos discos (están locos estos romanos austríacos):
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Al salir, vimos que el paraguas de Furgovw no había aguantado más el trote de tantos días, se había doblado, y ya no daba más de sí, así que hicimos lo que vimos en numerosas calles de la ciudad:

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Desde allí nos fuimos a la zona del Pratern, para ver el parque de atracciones, y tomar un café.

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Tras subir a la noria, y dar otra vuelta, nos vamos otra vez hacia el centro para seguir con los paseos turísticos.

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Iglesia San Carlos Borromeo:
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Duda: esto es estacionar o acampar?
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Monumento homenaje al soldado ruso (los rusos fueron los que liberaron la ciudad al final de la II Guerra Mundial):
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Calle vacía:
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Parece que ahora en Austria se pueden personalizar las matrículas...
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Ya de noche, cogimos un tranvía que nos dejaría cerca de donde está alojado nuestro amigo, para ir a enseñarnos una cervecería que le gusta mucho (y que a nosotros nos gustó igual o más): 7 Stern Braü, en la calle Siebensterngasse (http://www.7stern.at/). Tienen varios tipos de cerveza artesanal, y la comida se sale. Probamos la especialidad de la casa, que es una sartén de gnoquis de verdura y patata con champiñones, trozos de carne a la parrilla, recubierto todo ello de queso fundido, además de unas salchichas vienesas con chucrut que tampoco estaban nada mal. Además de precio, me pareció que no es nada caro: 38 € los tres, incluyendo dos rondas de jarras de medio litro.

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Desde allí, nos volvimos hacia el camping en el metro otra vez. Habíamos quedado para el día siguiente temprano, para irnos los 3 hacia Bratislava (Slovakia).



Día 11, sábado 23 de julio:



Nuestro amigo nos vino a buscar al camping para, desde allí, salir en dirección a Bratislava. Antes de salir del camping, estuvimos entretenidos con el trajin que se traían todas las mañanas unos ingleses allí alojados. Había como unas 7-8 familias inglesas, todas con caravana tirada por un todoterreno (ya fuera Nissan Pathfinder, LandRover Discovery, VW Tuareg, etc...). No estaban todos juntos en el camping, sino que estaban en varias zonas diferentes, aunque algunos juntos. Se movían de un sitio a otro con el todoterreno (creo que lo llevaban hasta pa ir a mear...). Pero ya lo que más mosqueaba, es que iban de la parcela de uno a la de otro, ponían el todoterreno al lado de otro, y empezaban a descargar cajas grandes (donde ponía electric generator) del uno al otro. El que había descargado se iba a su parcela, se ponía al lado de otro, y la misma operación. Cada vez unas 5 o 6 cajas. Y lo raro es que, además de que estaban todo el tiempo con el todoterreno de un lado para otro, sin hacer aparentemente nada, esto lo habíamos visto las 3 mañanas que estuvimos en el camping, sin entender muy bien la operación que se traían entre manos.

Dejamos en el camping a los guiris gastando gasoil de un lado a otro, y nos fuimos a Bratislava. El trayecto es de unos 80 km aprox. Tras parar en la frontera a comprar la viñeta, nos metimos por el centro para intentar aparcar, y vimos que casi todas las calles eran zonas reservadas de estacionamiento (con la matricula del coche puesta en cada plaza de aparcamiento). Paramos ya en una especie de plaza, donde preguntamos a unos polis si se podía estacionar allí (aunque había líneas amarillas), y nos dijeron que ahí mismo podíamos, que era gratis. Nos fuimos a ver el centro, tras lo cual comimos en una terraza céntrica, y después nos fuimos a otra terraza con sofás, donde tomamos café y disfrutamos de la conexión WiFi que nos permitió ver la etapa del Tour en directo en el móvil, para desesperación de alguna.
Cuando hubo acabado, nos fuimos a ver la zona del castillo, desde se puede ver toda la ciudad (y donde tampoco dejan entrar a los perros). Desde allí se ve el centro de la ciudad, que da la sensación de que estás en una ciudad pequeña, sin apenas turismo; pero también se ven todos los barrios periféricos que están al otro lado del Danubio, con interminables filas de bloques de viviendas de arquitectura típica del Bloque Soviético.

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El Danubio, que aquí tampoco es azul:
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Las hipotecas también han llegado al Este:
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El eslovaco es fácil: Peligro por pastores alemanes negros sueltos:
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Lo véis? Aquí pone: Descubre y construye el cuerpo:
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Ya por la tarde, y en un bar bebiendo cerveza, preguntamos a las camareras si había algún camping o sitio para dormir por allí. Nos dijeron que el único sitio era un camping llamado Zlaté Piesky, que estaba como a unos 10 km de la ciudad, pero no supieron decirnos cómo llegar. Después de preguntar a un chico que nos dió amablemente un montón de indicaciones que sólo sirvieron para salir en dirección opuesta al camping, y a unos policías que sin decir nada más el nombre de una ciudad que no recuerdo para que cogiéramos esa dirección, y que hizo que consiguiéramos ver en un cartel la salida hacia Zlaté Piesky. Este camping tampoco lo he puesto en FP, no porque no tenga fotos, sino porque no fue un FP. Llegamos al camping (http://www.intercamp.sk/) ya de noche, pasamos por recepción, y entramos. Ya al entrar se ven cosas raras. En la puerta, a un lado la recepción, y al otro una especie de garita de policía. Entramos, y nos dirigimos a la zona de acampada, donde había unas cuantas autocaravanas y furgos, difuminadas por varias praderas de hierba. Aparcamos la furgo, y lo primero que nos llama la atención es que se oye una música como de un concierto a un volumen bastante alto. Lo segundo que nos llama la atención, es que dentro del camping, que es un sitio gigantesco, haya cada cierta distancia, un chiringuito con su terraza, una pizzeria un poco más allá, otro restaurante más adelante... Ya había pasado la hora de cenar en un camping, pero como vimos el percal, no nos cortamos para sacar mesa y sillas y cenar al aire libre, pues la noche era de las mejores que habíamos tenido en todo el viaje. Además, el ruido no era problema, porque quedaba disimulado por el atronador ruido de música de fondo, y de los ruidos que hacían unos holandeses que llegaron justo después de nosotros con una caravana, y que lo primero que hicieron fue vaciarla entera allí mismo (no sabemos si les había pasado algo dentro...). La verdad es que imaginábamos que a eso de las 11 o 12 de la noche, la música pararía y los bares estarían cerrados. Pero nada más lejos de la realidad. Después de cenar nos dimos una vuelta por el recinto, hasta que encontramos el origen de la música, que no era otro que un fiestón que tenían montado en una zona, con 4-5 DJ's turnándose, y la peña con unas borracheras de miedo. De hecho, al volver a la furgo, y sentarnos otro rato al fresco, íbamos viendo que llegaba gente de fuera del camping a la fiesta. Y eso que la policía patrullaba con el coche por dentro del camping, sin dejar de dar vueltas. Pues bien, la movida duró hasta casi las 6 de la mañana, despertándonos también antes una pareja que se acercó por allí con la brillante idea de poner música en el móvil para tocar un poco más los cojones. No sé si los de la caravana les dijeron algo, porque estaban justo al lado, pero se fueron antes de que yo ya estuviera dispuesto a salir a mandarlos a tomar por el culo Bullock en mano. Dejo sin comentar el estado de los edificios de baños y duchas, construidos probablemente en el año 59, y que no disponían de agua caliente. El encanto del bloque soviético...

Nuestro amigo no había ido nunca a un camping. Dice que no le gusta mucho el rollo... Aunque ahora, cada vez que se habla de ir a tomar algo, dice que si vamos a Zlaté Piesky.



Día 12, domingo 24 de julio:



Nos levantamos en un tranquilísimo  y soleado día de domingo en camping, así que desayunamos tranquilamente, mientras unos 5 o 6 matrimonios autocaravaneros italianos y alemanes comentaban la jugada de por la noche. Después de recoger,  decidimos volver a Bratislava y adentrarnos en los barrios llenos de bloques de viviendas, para verlos de cerca. Muchos están todavía tal cual se construyeron en su día en Checoslovaquia, aunque otros muchos están recién pintados y maquillados, suponemos que no hace mucho, y seguramente de cara a la reciente adhesión a la Europa comunitaria.

Bloques pintados y sin pintar en los barrios periféricos:
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Después de hacer unas fotos, nos vamos dirección Austria, con idea de parar en Eisenstadt. A medida que llegábamos, el día se iba poniendo peor, hasta que comenzó a llover. Cuando estuvimos en Eisenstadt, dejamos la furgo en un parking subterráneo, y nos fuimos a ver la ciudad. Cuando salimos llovía y hacía mucho aire, lo justo para que no te den ganas de ver nada. Dimos una pequeña vuelta por la zona, y como lo vimos mal, nos fuimos a comer a un restaurante. Después, tomamos café en un bar muy chulo, situado en un patio interior de la calle principal (Café Central).

Este cartel dice que por favor dejen libre esas plazas para mujeres, puesto en unas cuantas plazas enormes, y sin ninguna columna. Lo que dice nuestro amigo: os dais cuenta de lo que es un país civilizado?   
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Como el tiempo no mejoraba, decidimos por unanimidad volver a Viena, y repetir cervezas y cena en el 7 Stern. Así que pusimos rumbo a Viena, a donde llegamos a media tarde. Aparcamos la furgo en la céntrica calle donde se aloja nuestro amigo, y nos fuimos a beber unas cervezas mientra llovía en la calle al Centimeter, otra conocida cervecería (http://www.centimeter.at/). Cuando nos cansamos de este local, nos fuimos al 7 Stern, y allí nos las dieron todas hasta que nos fuimos a dormir, no sin antes llevarnos unas cuantas cervezas de la casa de una máquina expendedora que tienen en la entrada. Por cierto, dormimos en la furgo tal cual había quedado aparcada.



Día 13, lunes 25 de julio:



Nos levantamos pronto, y después de desayunar con nuestro amigo unos croissants recién hechos, nos despedimos de nuestro anfitrión y pusimos rumbo a Zell am See, para intentar hacer la carretera del Grossglockner, decisión que habíamos tomado el día anterior. Llegamos a este bello pueblo a la hora de comer, y decidimos ir a ver el FP (enlace) que aparecía en el GPS. Después de ver la prohibición de pernoctar, decidimos entrar al camping  Südufer (enlace a FP). En la recepción, el responsable nos aconsejó no ir al Grossglockner esa tarde, pues no hacía buen tiempo, y al día siguiente parecía que daba buen día. Así que después de celebrar el ya comentado en otros viajes día de la fabada Litoral, nos fuimos al pueblo a dar una vuelta, donde pasamos toda la tarde turisteando entre mogollón de turistas musulmanes, que era lo que más abundaba allí.

Zell am See:
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Al final de la tarde nos acercamos hasta Kaprun, donde nos encontramos con una montaña rusa alpina, actividad que habíamos dejado pendiente. Así que aprovechamos que no había ya demasiada gente para hacernos una bajadita.

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Después nos fuimos al camping para cenar tranquilamente y relajarnos un rato antes de dormir, para madrugar al día siguiente.




Diá 14, martes 26 de julio:



Salimos temprano del camping, y nos fuimos directamente hacia la carretera del Grossglockner, tras comprar el ticket del peaje en el mismo camping por 27 €, creo que dos más barato que si lo pagas en la entrada (o eso nos dijo el del camping). La verdad que el paisaje ya desde Zell am See es espectacular. La carretera tiene diferentes miradores donde ir parando a contemplar el viaje, a hacer picnic, o lo que sea. Supongo que lo mejor será ver algunas imágenes de los paisajes, y dejarse de tanto rollo.

Parking a la entrada, y peaje de entrada a la carretera:
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Paisajes espectaculares:
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Punto más alto de la carretera:
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BMW's que no aguantan estos trotes...
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La carretera te sube hasta un complejo construido en las inmediaciones de la lengua glaciar del Pasterze, donde se encuentra el mirador Franz Josef Höhe, desde donde se contempla el glaciar y el macizo del Grossglockner, pico más alto de Austria, y que en el momento en que estuvimos alli estaba cubierto de nubes. Por cierto, con la furgo se puede entrar hasta el último parking que hay, ya que tiene unas medidas muy generosas en las entradas, y en las rampas interiores.

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Después, bajaríamos hacía el valle que se ve al fondo:
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Una vez vistas las marmotas, y pasado el rato entre los numerosos turistas, continuamos camino, ahora ya de bajada, hacia el final de la carretera Grossglockner - Hochalpenstrasse. Cuando bajábamos, por error nos metimos en un pueblo. Al darnos cuenta, nos pusimos a dar la vuelta en una especie de plaza, y allí vimos la Vito Marco Polo del forero Chuchi The Machine, y a Chuchi (un saludete  ) y su hermano enfriando con agua los frenos. Creo que el pueblo se llamaba Heiligenblut (si me equivoco, que me corrija Chuchi). Después de comentar brevemente los respectivos viajes, continuamos camino hacia Lienz, donde después de una breve parada, cogimos la Felbertauernstrasse (http://www.felbertauernstrasse.at/), otra carretera alpina de peaje con un túnel de unos 10 km, donde paramos a comer en una preciosa y tranquila área de descanso al lado de un río, y que nos llevaría a Innsbruck, pasando por Kitzbühel.

Llegamos a Innsbruck, y nos dirigimos al Camping Kranebitterhof (http://www.furgovw.org/index.php?topic=226271.0). Tras instalarnos, nos cogimos un bus hasta el centro, donde pasamos el resto de la tarde dando una vuelta,  terminando tomándonos una cerveza en la terraza que hay al lado del Tejado de Oro, viendo el estrés que acumulaban los turistas, mayoritariamente indios en esta ciudad, que iban de un lado a otro corriendo, como si fueran a trabajar.

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El trampolín olímpico de saltos de esquí:
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El famoso balcón dorado:
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Ya de noche, nos volvimos hacia el camping, donde cenamos y aprovechamos un rato el Wifi incluido en el precio.



Día 15, miércoles 27 de julio:



Llegaba el día de ir empezando a volver hacia casa, donde teníamos que estar como muy tarde el viernes antes de las 11 de la noche. Así que después de recoger los bártulos, nos acercamos a una gasolinera "barata" a llenar el depósito, y a un supermercado Billa cercano a comprar algo de comida y cargar con unas cuantas cervezas del país. Y carretera y manta, por la misma ruta que habíamos usado a la ida.  Hicimos una breve parada en el entorno del lago Konstanza para comer, y continuamos camino (pillamos un trozo de autopista donde quitar un poco de carbonilla a la T5, ya que a la ida la lluvia no lo había permitido), pasando luego por la Selva Negra, donde nos cayó una chupa de agua parecida a la que nos había caído a la ida, con lo cual desechamos el último intento de parar por la zona, y continuamos camino hacia Francia, pasando por Freiburg in Bresgau, y tomando ya en Francia La Soterraine, para no dejar un riñón en peajes. Paramos a cenar en Chalon-sur-Saône en el área de AC municipal, pero decidimos no quedarnos a dormir, pues andaban un grupillo de chavales en el parque de al lado con un movidón entre ellos bastante chungo, así que seguimos camino, parando a dormir en el área de AC de Génelard (http://www.furgovw.org/index.php?topic=226252.0).



Día 16, jueves 28 de julio:



Después de dormir tranquilamente unas cuantas horas, nos levantamos y nos fuimos a desayunar al pueblo, en el único sitio que vimos en la calle principal, que era un viejo Hotel regentado por dos chavales con una decoración muy curiosa y particular. A la vuelta a la furgo, breve parada en una tienda de vinos y licores, donde compramos algo de vino de Borgoña, y nuevamente a hacer kilómetros por la Soterraine, con destino a Oradour-sur-Glane, para hacer una parada que estaba pensada por si teníamos tiempo, y que tenía curiosidad por conocer.

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Aquí también murieron algunos refugiados republicanos:
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Continuamos camino, parando por la tarde en la Duna de Pilat, donde vimos un atardecer precioso desde lo alto de la duna.

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Buscamos luego el FP de Plage la Laguna de Arcachon (http://www.furgovw.org/index.php?topic=16349.0), donde cenamos casi sólos, y donde dormimos tranquilamente esa noche.


Día 17, viernes 29 de julio:



Tras disfrutar el desayuno al aire libre, retomamos la carretera hasta el área de Ac de Capbreton (http://www.furgovw.org/index.php?topic=1273.0), donde nos encontramos y conocimos nada más llegar al forero Gerar y familia, que venían de vuelta de sus vacas, con el que echamos un rato la parlada (un saludete majo  ). Tras un baño en la playa, y comida en la furgo, nos pusimos otra vez al volante, de camino a casa, a donde llegaríamos a las 20.30 aprox. con el marcador indicando esto:

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[Ñakona]

Bueno, pues ya está todo de momento. Me voy a meter el router debajo del grifo, que está que arde...

Espero que os guste,

Un saludo

[Wawita]

     Iñaki  estaba esperando esta crónica como agua de mayo 

Refrigera el router que estoy sin uñas esperando el resto   

[AlmaLeonor]

¡Hola!
¡¡Que viaje tan fantástico!! ¡¡Que bonito es Hallstatt!! Nosotros también estuvimos allí y nos quedamos tres días en su camping....
Estoy deseando ver la continuación paisano, jajajjaa
Besos.AlmaLeonor

[furgona]

Vaya viaje  Muchas gracias por la crónica 

[corvara]

Muy interesante!!!!
Gracias por compartir

[corsair]

No me pierdo esta crónica.

[alcasa]

vaya viejecito ey?  me alegro de que os gustara tanto Freiburg, ¿os fijasteis en los canalillos de agua en las calles?

buenas fotos, gracias por colocarnos en esta posición privilegiada, recuerda pasarme por M.P. tu e-mail y te paso mis fotos del Tourmalet

[Ñakona]

vaya viejecito ey?  me alegro de que os gustara tanto Freiburg, ¿os fijasteis en los canalillos de agua en las calles?

Sí, no sé si habrá por ahí alguna foto, porque ya era casi de noche cuando pasamos por esas calles. Pero la verdad es que la ciudad nos gustó mucho.
Un abrazo

Me alegro de que os guste, aunque haya metido un ladrillaco tan largo...

Un saludo a todos

[Wawita]

Segunda parte al mismísimo nivelazo que la primera.

Muy bien editado, con profusión de detalles que nos  servirán de referente para futuribles viajes por esa ruta tan atractiva.

Un millón de gracias por compartirlo   

[helix]

Gracia Ñakona.
Ha sido una crónica muy chula, es casi es mismo viaje que hicimos nosotros hace dos años. 
La verdad es que gustosamente repetiria otra vez como destino Austria.
Saludos.

[JOSEDUCATO]

Paisajes preciosos de Puzzle!!
A mi mujer la que mas le gusta es esta:
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[alcasa]

MMMMMMMMMMMMMM  esa tarta de chocolate es la sxatorte de Viena?

[junkhead]

Precioso todo, sin palabras... menuda envidia...